Rashford, entre dudas y mercados alternativos
El futuro de Marcus Rashford en el Manchester United parece cada vez más incierto. A sus 27 años, el delantero inglés ha perdido protagonismo bajo la dirección de Rúben Amorim y acumula cuatro partidos consecutivos sin minutos. Su situación, marcada por un salario elevado y un contrato vigente hasta 2028, dificulta su salida, a pesar de la evidente necesidad de encontrar nuevos horizontes.
Rashford, quien brilló en la temporada 2022-2023 como uno de los atacantes más destacados del panorama internacional, atraviesa un declive que ha despertado dudas entre los grandes clubes europeos. Tanto el Barcelona como el Atlético de Madrid han considerado su fichaje, pero la complejidad económica y la incertidumbre sobre su rendimiento han frenado cualquier movimiento concreto.
Un salario prohibitivo
El principal escollo para los interesados es el sueldo de Rashford, que supera las 300.000 libras semanales. Para entidades con márgenes financieros limitados como el Barcelona y el Atlético, esta cifra supone un obstáculo significativo. Aunque el perfil del jugador encajaría en los proyectos de ambos clubes, las interrogantes sobre su capacidad para recuperar el nivel que lo llevó a la élite alimentan la reticencia.
Mientras tanto, otros mercados comienzan a perfilarse como destinos posibles. Equipos de Turquía, como Galatasaray y Fenerbahçe, y de Arabia Saudí han mostrado interés en el delantero inglés. Sin embargo, el salto a ligas menos competitivas podría no ser atractivo para un jugador que hasta hace poco se desempeñaba en la élite del fútbol europeo.
Una salida incierta
Por el momento, Rashford enfrenta un panorama complejo. Su nombre sigue generando rumores en el mercado, pero ninguna oferta sólida parece satisfacer tanto al jugador como a los clubes interesados. Con el mercado invernal a la vuelta de la esquina, su situación será uno de los focos a seguir, aunque las dudas, por ahora, parecen pesar más que las certezas.